El vals se escucha a lo lejos, tan triste como un susurro que no quiere ser escuchado, se deja entonces enmascarar por una música más estridente, más llamativa, los tambores y las trompetas resuenan como si no hubiese un mañana, todo aquello en un espacio mágicamente reducido solo para dos..lleno de muchos otros, pero preferiría creer que existía magia, que existía algo que social/mente A y B deseaban estar construyendo, (o solo A?) podrían durar en ese lugar, unas horas, unos segundos o una eternidad si así lo quisieran pero para poder estar en él, solo era necesario bailar; bailar hasta que los pies se ampollasen, los zapatos dejasen sus huellas en las baldosas, y la música siguiese sonando no solo en los equipos.. sino que retumbase en la cabeza.. varias horas después... que repicase como retumba un beso que llega a la médula, te sienta con los ojos desorbitados, incrédulos por que así lo querías.. por que así alguna vez lo imaginaste y por que después el siguiente paso.. como en el baile depende solo del ritmo de la música.
Tiempos aparte... ¿se te ha formado un nudo en el estomago? alguna vez? - puesto que no sabes que sigue? puesto que quieres imaginarte la mejor parte.. no te quieres quedar con las manos cruzadas... pero es el tiempo el que decide q va a suceder..y te da miedo por q el mismo tiempo lo haces tu- nadie más- el ritmo lo pones tu... yo propongo empezar con un adagio..pero no se las palabras para decírtelo - tengo mariposas que salen de todos lados...et elles ne sont pas dans mon tete...
*el titulo me recuerda una canción.. un vals.. prosaicamente .. es lo que quiero: un vals..
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