Te invito a que nos tomemos un café- ¿seguro quieres ir? - es que me asalta la duda si te gusta el café algo salado, no se si realmente pueda contener las lagrimas mientras hablo.. por que ya no queda mucho que hablar, pues ya escrito la mayoría y no se que piensas al respecto- no se que tantas sean mis palabras o que tantas sean las tuyas por que tengo la seguridad de que nos perdemos en la mirada del otro. y se me escurren las lagrimas de tanto que hemos dejado atrás.
te invito a un cafe pero no olvides que despues del cafe tenemos la ciudad entera para nosotros... caminarla recorrerla como extesion de nuestros cuerpos.
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